Peso | 0.219 kg |
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Dimensiones | 19 × 12 × 2 cm |
Publicado en 2013
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“La novela “Guía satánica de Gerona” de Nibaldo Acero –con personajes al límite e impenitentes– es una guía de rebelión y de autoexilio, un exorcismo y una epístola amorosa en lucha contra los tóxicos poderes que destruyen el mundo”.
Chancacazo |
$6.000
Peso | 0.219 kg |
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Dimensiones | 19 × 12 × 2 cm |
Publicado en 2013
La protagonista de este cuento ilustrado, Amina, nace hace más de un siglo en un pueblo en el que no hay nadie como ella; nadie con quien jugar, nadie con quien compartir sus curiosidades y sus búsquedas. Por eso, a los dieciséis años decide irse de su casa y de ese pueblo. Curiosamente, lo hace sin miedo, sin preguntarse si está bien o mal, solo porque es lo único y mejor que se le ocurre hacer. “Amina” es la historia de su viaje, un cuento para grandes escrito como un cuento para niños. |
En Un largo solo la concisión, sutileza y elegancia se unen admirablemente con el ímpetu y la vitalidad. Roberto Bolaño observa: es una poesía hecha de «sangre suspendida en el aire». En los tres conjuntos de poemas aquí reunidos, Bruno Montané muestra sorprendentes variaciones dentro de su muy reconocible estilo, alternando íntimas visiones, con permanentes meditaciones sobre el oficio de la escritura y continuos aterrizajes a realidades concretas de fuerte sensorialidad, no exentas de preocupaciones políticas y sociales. Todo lejos de grandilocuentes proclamas, falsos mesianismos y torpes heroicidades, en textos más bien próximos a experiencias cotidianas marcadas por la atmósfera del sueño y las fugaces impresiones de nuestros sentidos. Son las visiones de un maestro disfrazado de aprendiz, quien nos entrega parte de su luminosa bitácora sobre esa elusiva y musical forma de conocimiento que es la poesía.
Cristian Geisse Navarro
Manuel Moreau regresa donde su madre y su abuela a vivir en el departamento de su infancia. A partir de este encuentro los ritmos familiares empiezan a disgregarse a destiempo, debido a una serie de hechos inesperados que remecen una aparente armonía. Los personajes de esta novela, sin tener mucha conciencia de lo que les ocurre, van entrelazando sus emociones en torno a ciertas verdades en un presente donde lo que se descubre es el reflejo de la fragilidad en lo cotidiano. Con una narración visual y aguda, este libro nos invita a sentir cómo los días que parecieran ser simples esconden pistas acerca de lo irónico de nuestra existencia. |
“Pompeya”, en palabras del dramaturgo, fue escrita en un período de cuatro años aproximadamente y fue estrenada el 2017. Una textura cruda, ruda, dura y violenta da sustento a las palabras de Leila, Suzuki, Beyoncé y el maricón Lucho. Sus voces son las voces de las y los excluidos, las travestis y el maricón. Un universo plagado de transas en las esquinas, en el que se vende la tele para comprar cocaína, riñas callejeras por el territorio que, al fin y al cabo, no es de nadie. Se siente en este espacio el odio entre chilenas, colombianas, ecuatorianas y peruanas; y se patentizan las muertes, muchas muertes que quedan impunes, porque tal como dice Leila, la más rabiosa de las travestis: “Los pacos no van a mover el culo. Pa’ ellos una trava desaparecía no es ni una hueá […] Somos pobres y putas, si no hacemos justicia por nuestras manos, nadie va a hacerla”.
Texto de Maritza Farías Cerpa |
2021. En La pajarera Eduardo Plaza (1982) despliega un admirable abanico narrativo para delinear Coquimbo o, más específicamente, sus recovecos y su imaginería. Un caudillo busca transformar la ciudad en un epicentro del turismo pirata y, a la vez, en un muestrario de todas las potencias del mundo; una celebración anual empuja al frenesí colectivo, pero también a charlatanes y criminales; el guitarrista de una célebre banda de cumbia elige —después de recorrer el país y el extranjero— no moverse del nido; una adictiva investigación advierte la presencia y la negación de los changos como pueblo originario de la bahía; y como telón de fondo, siempre latente y delicado, un cuadro familiar lleno de grietas, fantasmas, giros y rearmes. A medio camino entre la crónica, la novela y el mejor relato periodístico, Eduardo Plaza logra —con sutileza, precisión y un asombroso tino narrativo— una voz que sopla suave, pero, al mismo tiempo, remece mediante un humor punzante y una melancolía tan enigmática como conmovedora. Un libro híbrido, entretenidísimo, apreciable. <>.