Peso | 0.235 kg |
---|---|
Dimensiones | 23 × 15 × 1.2 cm |
Publicado en 2015
Subtotal: $6.000
“Barbecho” da cuenta de la historia de Villaseca, pueblo muy poco conocido fuera de Limarí, y concluye con la reorganización de su tejido social, con nuevas entidades como el Comité de Regantes, el Sindicato de Regantes, el Sindicato de Exonerados y la Unión Comunal de Juntas de Vecinos Rurales, entre otras. |
$4.000
Peso | 0.235 kg |
---|---|
Dimensiones | 23 × 15 × 1.2 cm |
Publicado en 2015
2015. Desde los diferentes países donde residió a lo largo de su vida y en los que se compenetró con la cultura, las personas y los niños, Gabriela Mistral escribió cientos de artículos que abordan temas de contingencia política, social o del ámbito de la pedagogía. Esta selección realizada por Diego del Pozo incluye textos inéditos y otros publicados en medios de comunicación que recorren, junto con la autora, cuatro décadas de América y Europa. Su prosa analiza y propone, juzga y rescata; en ella están presentes los problemas, los inocentes, los culpables, educadores, artistas, dictadores, gobernantes y los que verdaderamente están haciendo algo por la paz, la educación de los niños y la humanidad futura que a ella especialmente preocupó.
“Texto testimonio de una estancia en el norte. Estancia en el doble sentido: a su manera una propiedad de tierra indefinida y extensa, aunque simbólica, testimonio de un precario habitar, de una advenediza apropiación, cuyos títulos son los que otorgan los textos. Entiéndase títulos de propiedad simbólicos, provisionales, otorgándole a la poesía o al lenguaje una función de posicionamiento. Consciente o inconscientemente se le concede a la poesía cierta condición de posicionamiento, que hoy llamaría las marcas simbólicas territoriales que nuestros hermanos mamíferos u otros seres replican o nos demuestran de otra manera”
(del Prólogo). |
«Imagino que Jean Giono habrá plantado no pocos árboles a lo largo de su vida. Sólo quien ha cavado la tierra para acomodar una raíz o la promesa de ésta podría haber escrito la singularísima narración que es El hombre que plantaba árboles, una indiscutible proeza en el arte de contar. (…) Y ésa es la conclusión: estamos esperando a Elzéard Bouffier, antes de que sea demasiado tarde para el mundo.»
José Saramago |
Autor: Héctor Álvarez Godoy.
“Uno de los elementos más interesantes de su dramaturgia es la fidelidad a sus orígenes; todas estas obras nos traen recuerdos, fragmentos, pedazos de historias sobre el “Norte Chico”, de los que hemos escuchado rumorear. Y sin embargo, siendo este el hilo que une las cuatro historias aquí representadas, resultan entre ellas eclécticas y diversas en sus paisajes, personajes y relatos.
El autor, aparece como un verdadero antropólogo de la lengua nortina; escribe diálogos donde los modismos e imágenes nutren de realidad y de verdad el relato dramático. Es como si él mismo hubiese estado parado de niño en esas cocinas, entre mujeres y sirvientas, en los valles secos, entre pastores tomando mate, apeando sus burros y mirando ese cielo azul tan grande del norte chileno, como si las travestis coquimbanas fueran sus amigas y confesoras, tanto como para saber tan bien cuales son los profundos deseos de sus almas.
La presente selección nos comunica y conecta con una memoria regional que pone en discusión el concepto de identidad en tanto nos hace preguntarnos ¿qué somos si también somos esto que no conocíamos? Si bien los textos son primeramente bitácoras de ensayo, remarcan sin duda, lo social como un compromiso personal asumido por el autor, quien milita apasionadamente en cada uno de ellos”.
Prólogo: Cristóbal Pizarro Schkolnik. Actor de la Universidad de Chile (2009) y Master en Escritura Dramática (2015), por la Royal Central School of Speech and Drama de Londres, Reino Unido. Traductor y director.
Imagen de portada: Ricardo General.
2021. En La pajarera Eduardo Plaza (1982) despliega un admirable abanico narrativo para delinear Coquimbo o, más específicamente, sus recovecos y su imaginería. Un caudillo busca transformar la ciudad en un epicentro del turismo pirata y, a la vez, en un muestrario de todas las potencias del mundo; una celebración anual empuja al frenesí colectivo, pero también a charlatanes y criminales; el guitarrista de una célebre banda de cumbia elige —después de recorrer el país y el extranjero— no moverse del nido; una adictiva investigación advierte la presencia y la negación de los changos como pueblo originario de la bahía; y como telón de fondo, siempre latente y delicado, un cuadro familiar lleno de grietas, fantasmas, giros y rearmes. A medio camino entre la crónica, la novela y el mejor relato periodístico, Eduardo Plaza logra —con sutileza, precisión y un asombroso tino narrativo— una voz que sopla suave, pero, al mismo tiempo, remece mediante un humor punzante y una melancolía tan enigmática como conmovedora. Un libro híbrido, entretenidísimo, apreciable. <>.